Pulmones se recuperarían en 3 meses tras COVID-19 grave: estudio

Pulmones se recuperarían en 3 meses tras COVID-19 grave: estudio

Los pulmones se recuperarían luego de tres meses de enfrentar un cuadro grave de COVID-19, de acuerdo con un estudio realizado por el centro médico universitario de Radboud, en Países Bajos.

El análisis publicado el pasado 21 de noviembre en la revista Clinical Infectious Diseases contrasta con otras investigaciones efectuadas en el inicio de la pandemia, que plantean un daño permanente en personas que padecieron COVID-19.

Refiere que las secuelas de los recuperados de coronavirus son similares a las que se presentan luego de padecer una neumonía aguda, lo cual es considerado por los especialistas como muy positivo.

Afirman que los pulmones de las personas de quienes enfermaron gravemente de COVID-19 presentan una buena recuperación tres meses después de la infección, en la mayoría de los casos, tras analizar a 124 pacientes que se recuperaron de infecciones graves por este virus y que fueron invitados consecutivamente a un centro ambulatorio de cuidados posteriores.

Ponen a la venta la primera prueba sanguínea para diagnosticar alzhéimer

Ponen a la venta la primera prueba sanguínea para diagnosticar alzhéimer

En Estados Unidos se puso a la venta la primera prueba sanguínea para ayudar a diagnosticar alzhéimer, lo que representa un importante paso en el campo que podría hacer mucho más fácil que la gente sepa si padece demencia.

Sin embargo, también genera preocupación sobre su precisión y el impacto de conocer una noticia tan fuerte.

Por lo anterior, expertos independientes se muestran cautelosos dado que los resultados clave de la prueba no han sido publicados y que la prueba misma no ha recibido la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés).

La prueba está siendo vendida bajo reglas más generales para laboratorios comerciales, pero los expertos coinciden en la necesidad de contar con una prueba simple que pueda realizarse en un consultorio médico.

Actualmente, la mejor manera de medir la presencia de la proteína es una costosa tomografía por emisión de positrones que los seguros médicos generalmente no cubren, por lo que la mayoría de la población no se lo practica y termina preguntándose si sus problemas se deben al envejecimiento normal, al alzhéimer u otra razón.

La prueba sanguínea de C2N Diagnostics, una firma con sede en San Luis, Missouri, busca llenar ese hueco.

C2N Diagnostics cobra mil 250 dólares por la prueba (unos 25 mil pesos mexicanos) y ofrece descuentos con base en los ingresos de los pacientes.

Sólo los médicos pueden solicitar la prueba y los resultados se obtienen dentro de 10 días.

Se venderá en casi todos los estados de Estados Unidos y acaba de recibir la autorización para su venta en Europa.

Los científicos analizan, por primera vez, la señal que revela el origen del universo

Los científicos analizan, por primera vez, la señal que revela el origen del universo

Hasta ahora solo sabíamos cómo se ‘alimenta’ el Sol, pero desconocíamos cómo lo hacen otras estrellas más potentes. Nuestro astro rey crea energía fusionando hidrógeno en helio en un proceso denominado cadena protón-protón (pp), pero las estrellas más potentes fusionan tres elementos a través del ciclo carbono-nitrógeno-oxígeno (conocido por sus siglas: CNO).

La cadena pp se había estudiado fácilmente, ya que así el Sol produce el 99 por ciento de su energía. Sin embargo, para analizar las CNO había que captar una supernova, la explosión de las estrellas al morir. Se necesitaba «cazar» los neutrinos, la energía que desprenden los astros más grandes.

Ya se había teorizado sobre ello en 1930, pero faltaban pruebas científicas y estas llegan desde lo más profundo de la tierra, concretamente del Borexino. Es una inmensa esfera de acero construida por el Instituto Nacional Italiano de Física Nuclear en el laboratorio científico subterráneo más grande del mundo. Está bajo el Gran Sasso (en los Apeninos), debajo literalmente de 1.400 metros de roca. Para llegar hasta él, hay que recorrer 10 kilómetros por un estrecho túnel.

Borexino mide los neutrinos, la parte más pequeña de la materia que se conoce y que, además, se mueven a la velocidad de la luz. Una escurridiza y ansiada prueba para los científicos. Mientras que los rayos del sol nos llegan a diario, la energía de una supernova se puede detectar cada 30 años o más. Es necesario captarla sin ninguna interferencia.

Neutrinos, llaves del universo

Este estudio, que ahora publica la revista Nature, arrancó en 1990 bajo las predicciones teóricas realizadas en 1930 por Hans Bethe y Carl Friedrich von Weizsacker. No es de extrañar que muchos lo consideren «un hallazgo experimental de valor histórico«: «Es realmente un gran avance para la física solar y estelar», ha asegurado Gioacchino Ranucci, del Instituto Nacional Italiano de Física Nuclear (INFN), según recoge la NBC. «Esta es la primera evidencia de que el ciclo CNO está funcionando bajo el sol y las estrellas».

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Así es el cazador de neutrinos (Foto: © Borexino Collaboration/LNGS-INFN)

Así es el cazador de neutrinos (Foto: © Borexino Collaboration/LNGS-INFN)

Según Ranucci, el detector Borexino ha pasado décadas midiendo neutrinos de la principal reacción en cadena de protones y protones del sol, pero la detección de sus neutrinos CNO ha sido muy difícil: sólo se detectan al día unos siete neutrinos con la energía reveladora del ciclo CNO. Para conseguir este descubrimiento, han trabajado para que el detector fuera cada vez más sensible, protegiéndolo de fuentes externas de radiactividad, por lo que cuenta con una cámara interna con un tanque de agua de 300 toneladas.

Para el físico de partículas de la Universidad de Berkeley (California), Gabriel Orebi Gann, «este descubrimiento nos lleva un paso más cerca de entender la composición del núcleo de nuestro sol y la formación de estrellas pesadas».

Según Orebi Gann, los neutrinos se producen naturalmente en reacciones nucleares y pasan a través de la mayoría de la materia sin efecto, por lo que se pueden utilizar para sondear regiones inalcanzables del universo.

Un buque científico graba el choque de un meteorito

Un buque científico graba el choque de un meteorito

El buque RV Investigator de CSIRO, que colabora con la agencia científica nacional de Australia, se encontraba en el mar de Tasmania, a unos 100 kilómetros de la costa, cuando se produjo la entrada del meteorito (el pasado 18 de noviembre). Por suerte, este barco lleva siempre encendida sus cámaras de transmisión en vivo. No para de grabar: 24 horas/7 días a la semana se puede ver por dónde navega y qué estudia el barco. Las imágenes en directo están disponibles para cualquiera desde la web de la Marine National Facility (MNF).
Al comprobar las grabaciones, los científicos descubrieron que lo habían «capturado»: «Lo que vimos al revisar las imágenes de la transmisión en vivo nos asombró, el tamaño y brillo del meteoro fue increíble», ha asegurado en un comunicado John Hopper, uno de los investigadores a bordo.

«El meteoro cruza el cielo directamente en frente del barco y luego se rompe. Fue increíble ver las imágenes y tuvimos mucha suerte de haberlo capturado todo en la transmisión en vivo», ha explicado Hopper. Otro de los investigadores a bordo, Glen Nagle, ha recalcado la enorme suerte que tuvieron: «Las cámaras están en todas partes, en nuestros bolsillos y alrededor de nuestras ciudades, pero tienen que señalar el lugar correcto en el momento adecuado y el RV Investigator estaba en ese lugar y a esa hora».

El momento exacto

«Más de 100 toneladas de desechos espaciales naturales ingresan a la atmósfera de la Tierra todos los días. La mayor parte pasa desapercibida ya que ocurre en un área despoblada como el océano austral. Cuando un meteoro entra en la atmósfera de la Tierra a alta velocidad, es la fricción de la roca con la atmósfera lo que los hace arder, ya que su energía cinética se convierte en otras formas como calor, luz y sonido», ha explicado Nagle.

CSIRO ha compartido las coordenadas exactas donde impactó el meteorito

CSIRO ha compartido las coordenadas exactas donde impactó el meteorito

«Muchos meteoritos fueron asteroides y viajaban por el espacio en su propia trayectoria. Esto cambia a medida que pasan cerca de la Tierra, donde pueden verse afectados por su atracción gravitacional. A medida que entran en nuestra atmósfera se convierten en meteoros, y su entrada puede ser visualmente espectacular«, ha concluido el científico.

Júpiter podría tener ambientes “habitables” en sus lunas heladas

Júpiter podría tener ambientes “habitables” en sus lunas heladas

Un equipo multidisciplinario de la Universidad de Oviedo y el Centro de Astrobiología (CAB) del Consejo Superior de Investigaciones Científicas y el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial en España lograron describir las propiedades de un nuevo tipo de material que se puede formar en los océanos de las lunas heladas de Júpiter y que contiene elementos químicos que utiliza la vida tal y como la conocemos.

Se trata de un hidrato de gas, más puntualmente dióxido de carbono, un compuesto en el que el agua y el gas se mezclan formando una estructura diferente.

Esta nueva estructura se considera un “hielo relleno” en el que el agua forma canales donde se aloja el dióxido de carbono.

El material descubierto podría formarse en las lunas heladas de Júpiter, como Ganímedes, el cuerpo planetario con más agua líquida del Sistema Solar bajo su corteza de hielo.

Según los expertos, esto tiene importantes consecuencias a nivel geológico y astrobiológico, ya que permitiría a una fuente de carbono, como es el dióxido de carbono, estar en contacto con agua líquida con sales disueltas a temperaturas alrededor de los 0°C, abriendo así las posibilidades de formación de vida en los océanos interiores de las lunas heladas de Júpiter.

Ilustración donde se muestra la posición que ocuparía la capa de la nueva fase de alta presión del hidrato de dióxido de carbono en la estructura interna de Ganímedes, luna de Júpiter. | Foto: CAB.

© Proporcionado por UnoTV Ilustración donde se muestra la posición que ocuparía la capa de la nueva fase de alta presión del hidrato de dióxido de carbono en la estructura interna de Ganímedes, luna de Júpiter. | Foto: CAB.

De acuerdo con Fernando Izquierdo, investigador de la Universidad de Oviedo y autor del artículo, “es posible que el dióxido de carbono pueda moverse libremente a través de la estructura sólida, lo que permitiría a este gas atravesar la barrera de hielo que se formaría entre la roca en el fondo del océano lunar y alcanzar las capas superiores”.

Por su parte, Olga Prieto Ballesteros, investigadora del CAB y coautora del estudio señaló que “los hidratos de gas tienen la capacidad de almacenar moléculas que incluyen elementos esenciales para la habitabilidad planetaria, de ahí su gran interés astrobiológico”.

El trabajo realizado por el grupo de Química Teórica y Computacional de Materiales (QTCMAT) de la Red Malta Consolider de la Universidad de Oviedo y por el Centro de Astrobiología INTA-CSIC de Madrid, fue publicado en la revista especializada “ACS Earth and Space Chemistry”.

¿Es real? Hallan al gemelo del Sol en región de señal extraterrestre ¡Wow!

¿Es real? Hallan al gemelo del Sol en región de señal extraterrestre ¡Wow!

Una estrella idéntica al Sol ha sido identificada como fuente potencial de la enigmática señal extraterrestre ¡Wow! tras un análisis de datos del observatorio espacial Gaia de la ESA. Te contamos todo lo que sabemos.

A lo largo de la década de 1970, el radiotelescopio Big Ear en Ohio buscó señales de civilizaciones extraterrestres. Y el 15 de agosto de 1977, el astrónomo de Ohio State Jerry Ehman encontró una señal fuerte e intermitente que duraba 72 segundos, que se destacaba del ruido de fondo como un reflector.

El equipo descartó rápidamente un origen terrestre o una transmisión desde un satélite. Sin embargo, la señal era tan poderosa e inusual que Ehman anotó la señal con la palabra Wow! (guau en inglés), junto a los datos impresos de la misma.

El director del observatorio, John Kraus, dijo entonces que «la señal Wow! es muy sugerente de un origen inteligente extraterrestre, pero poco más se puede decir hasta que regrese para un estudio adicional», escribió en un carta al astrónomo Carl Sagan.

El equipo de Big Ear continuó observando la misma parte del cielo, pero la señal !Wow! la señal nunca regresó. Tampoco se ha observado nada parecido en ninguna otra parte del cielo. Kraus y otros incluso han buscado estrellas que podrían ser la fuente de la señal:

«Revisamos los catálogos de estrellas para ver si había estrellas similares al Sol en el área y no encontramos ninguna», escribió Kraus. Hasta el día de hoy, la señal permanece sin explicación y sin repetición.

En un nuevo esfuerzo, el astrónomo amateur Alberto Caballero buscó estrellas parecidas al Sol entre las miles que han sido identificadas por Gaia en la región del cielo de la que procedió la señal, con la hipótesis de que un exoplaneta en órbita de alguna de ellas pudiera albergar una civilización avanzada capaz de transmitir señales. Por similar al Sol, se refiere a estrellas que comparten la misma temperatura, radio y luminosidad.

La búsqueda arrojó solo un candidato:

«La única estrella potencial similar al Sol en toda la región de la que procedía la señal Wow! parece ser 2MASS 19281982-2640123», dice Caballero en un artículo publicado en el repositorio arXiv. Esta estrella se encuentra en la constelación de Sagitario a una distancia de mil 800 años luz. Es un gemelo idéntico a nuestro Sol, con la misma temperatura, radio y luminosidad.

Por supuesto, el trabajo de Caballero no significa que 2MASS 19281982-2640123 deba haber sido la fuente. Señala que hay muchas estrellas en esa región del cielo que son demasiado tenues para ser incluidas en el catálogo. Uno de ellas podría ser la fuente, informa astronomy.com.

Y hay otras 66 estrellas en el catálogo extraído de los archivos de Gaia que Caballero identificó como posibles candidatos, pero con pruebas menos contundentes. Estos coinciden con la temperatura del Sol, pero los datos sobre su luminosidad y radio están actualmente incompletos. Por lo tanto, las futuras publicaciones de datos de Gaia y otros proyectos de mapeo podrían revelarlos como coincidencias.

Pero por el momento, 2MASS 19281982-2640123 es nuestra mejor apuesta y un buen candidato para estudios futuros. Caballero dice que un objetivo obvio sería buscar señales de exoplanetas orbitando esta estrella. También podría priorizarse para su estudio en la parte radioeléctrica del espectro.